Mi regreso a Bahía Blanca, está repleto de eventos insólitos que gracias a Dios, el destino o la experiencia de tantos años en ésta apasionante profesión, siempre tuvieron una increíble repercusión. En este nuevo tramo, la propuesta llegó de parte de César Líberman, propietario de Deportes Preti, una acreditada firma dedicada a la venta de calzado deportivo, con una larga trayectoria en este rubro. Los Líberman constituyen una sociedad de familia, y el fundador de esta empresa fué el padre de César, un visionario comerciante que comenzó desde abajo y con mucha capacidad le dió forma e impulso a este emprendimiento, para con el tiempo retirarse y confiarle a su hijo la conducción del negocio. La idea en principio era crear un folleto con ofertas de productos, pero tanto la intención de César como la mía, era no caer en lo clásico y usualmente repetido en éste tipo de anuncios, por ejemplo fotos de las prendas y zapatillas con el precio al pié , sino diferenciarnos en cuanto a la presentación gráfica y lanzar algo original tanto en el diseño como la calidad de impresión. En una de las primeras conversaciones que mantuve con César, nos fuimos poniendo de acuerdo en bocetar un producto publicitario que se llamó "Ofercómic" y sobre este nombre comenzamos a trabajar en la creación de una familia tradicional conformada por un matrimonio con tres hijos que deciden ir a Preti a comprar zapatillas y ropa deportiva. Ya con los dibujos de la familia protagonista, decidimos que las ocho páginas que contenía este folleto fuera de serie, fueran en verdad una historia hecha con los cuadritos y diálogos propios de un cómic y así con mucho entusiasmo, le fuimos dando vida en originales a todo color. Por primera vez en la historia de los volantes, se realizó un lanzamiento único del "Ofercómic", que además de un guión, dibujos y ofertas varias, tenía un cupón recortable para que quienes recibían la pieza gráfica en su domicilio o con entrega en mano realizada por promotoras ubicadas en lugares estratégicos de la ciudad, pudieran participar sin compromiso de compra de un importante sorteo extra con casi 200 premios. En los dos principales canales televisivos de aire de la ciudad y también en radio, se realizó una campaña televisiva muy contundente publicitando la aparición del "Ofercómic". La respuesta del público fué inmediata, en el acceso que Preti tiene sobre calle O´Higgins 46, la arteria más comercial y concurrida del centro bahiense, se colocó una urna de grandes dimensiones para albergar los miles de cupones que iban ingresando a diario y también un stand para suministrar información sobre este concurso que en el mes de Enero, tendría su cierre con el sorteo de diferentes y atractivos premios para aquellos que hayan participado. César es un personaje muy particular, no es un tipo estructurado o prejuicioso y además muy inteligente en el manejo de una empresa de esas características y simultáneamente, tiene un interior humano sumamente sensible e imaginativo que le permite mantener intacto a su niño interior. La personalidad de César me impactó desde que lo conocí, porque entre sus virtudes, además de ser un comerciante muy responsable, también posee la invalorable condición de ser un buen amigo de sus amigos.
"El Ofercómic" número uno, fué un éxito rotundo. Habíamos logrado nuestro cometido. El público se sorprendía al ver el ejemplar, lo leía con interés, guardaba la pieza que había sido impresa en muy buen papel ilustración y además recortaba los cupones que superaron por su cantidad todos los cálculos iniciales.
Cuando llegó el momento de armar el gran show del sorteo, César se encargó de ocuparse de todo lo relacionado con el montaje del escenario, sonido y contratar a Rulo Delgado, un conocido músico local que años atrás, y antes de irme a vivir a Mar del Plata, había trabajado conmigo en los programas televisivos del "Club de Sapienso" que durante mucho tiempo se emitió por Canal 9 Telenueva de Bahía y Canal 10 de Mar del Plata, donde "Rulo" se impuso con "La Conga de los Sapitos" un tema de mi autoría que aún sigue vigente en los festivales donde éste músico se presenta.
A César se le ocurrió que el evento del sorteo, se llevara a cabo frente al local de calle O´Higgins en un día de semana, lo que implicaba un gran desórden y trastorno en el tránsito automotor, ya que el show estaba programado para los primeros días del mes de Enero y en esa época, aunque era verano, mucha gente aún permanecía en la ciudad.
Finalmente la municipalidad autorizó el corte de la calle, destacándo a inspectores para que desvíen y ordenen el intenso desplazamiento vehícular.
Una hora antes del espectáculo, la calle O´Higgins, casi Drago comenzó a llenarse de gente, principalmente familias que llegaban acompañadas por niños. El clima era super festivo y el calor agobiante que reinaba en aquella jornada no había conseguido amilanar a la multitud presente. Como parte de mi acuerdo con César, me tocaría a mí conducir el espectáculo, misión que me causó mucha alegría, ya que me estaría reencontrando nuevamente con el público de mi ciudad que una vez más había respondido masivamente a otra convocatoria muy particular donde el ambiente festivo contagiaba realmente. La banda de "Rulo" hizo una actuación impecable, el ritmo contagiaba a grandes y chicos a través de un audio que se escuchaba con potencia y claridad en los doscientos metros donde se encontraban las miles de personas presentes. Las alternativas del sorteo con su correspondiente entrega de premios se iba realizando con orden y alegría. Muchos de los asistentes subian al escenario a cantar y logramos sostener un ritmo ágil que se mantuvo bién arriba y no decayó en ningún momento. Ya en el final del cierre del "Ofercómic", veo que César quién desde el inicio junto a un grupo de colaboradores estaba atento a cada una de las necesidades que teníamos arriba del amplio escenario, imprevístamente sube al mismo llevando consigo varias camisetas correspondientes a los clubes River Plate y Boca Juniors. Sin decir palabra, César se acercó sonriente al borde del escenario y comenzó a arrojar las camisetas hacia el público, que al ver volar por el aire estas codiciadas prendas pugnaba frenéticamente por adueñarse de alguna de ellas, ya que constituyen un trofeo de valor considerable. Cuando estas camisetas se terminaron, César siguió regalándo ojotas, mallas de baño y todo lo que su personal le iba alcanzando para lograr un feliz broche de oro a este show irrepetible y poco común. Con el "Ofercómic", había despertado una forma novedosa de publicitar productos, donde los personajes cobraban vida, hablában de los productos, sus ventajas y precios. Tanto César como yó, desde el comienzo de éste proyecto, sabíamos que estábamos a punto de incursionar en un formato de marketing directo nunca antes utilizado y que el intento podría fallar, algo que felizmente no sucedió y tuvo la repercusión que anhelábamos. A partir de aquello y hasta la actualidad, con César mantenemos una relación afectiva muy sincera y aunque no nos vemos con frecuencia, es habitual recibir su llamado telefónico anual donde infaltáblemente me recuerda que estoy invitado a la cena que acostumbra organizar para todo su personal y donde año a año me incluye con la misma consideración de un viejo amigo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario